Los
reencuentros son parte importante de nuestras vidas, hacen que los ex novios se
vean mas espantosos que la ultima vez que los viste, que los grupos noventeros
que te gustaban te den pena y que las amigas que dejaste de ver hace mucho
tiempo ahora tienen bebes y muchos problemas.
Hablando específicamente
de grupos noventeros y pidiendo perdonen mi antiguo mal gusto, mi muy buena
amiga y compañera de mal gusto Azul y yo fuimos a ver a Mercurio (si, el grupo
con 5 “chavitos buena onda”), yo se que mi declaración es grave, pero créanme
que no es tan grave como la desilusión que nos llevamos al ver a nuestro ex grupo
favorito de la adolescencia bailar y cantar casi con un bastón en las manos. El
momento cumbre de nuestra noche fue cuando tremendos cuarentones se ponen a
cantar su hit noventero “13 años” que dice algo como: “crecer, convertirse en
mujer, tiene 13 años y es quien enchina mi piel” 0_0 claro que me dio pena,
pero mas que pena miedo, yo esperaba el momento en el que iba a entrar la policía para
llevarse a los pedófilos cuarentones a prisión.
Ya la noche
casi llegaba a su final y mi amiga y yo nos moríamos de pena por haber decidido
estar ahí y más aun de haber comprado los boletos cuando en la puerta los vendían
a 50 pesitos.
Cuando creíamos
que los “chicos buena onda” no podían hacernos pasar mas momentos vergonzosos traaaas!!!
se apagan las luces, se escuchan gritos de
señoras (como nosotras) por todos lados, y todos los integrantes
regresan y deciden subir al escenario a sus esposas e hijos, fue ahí donde no
aguantamos mas y nos salimos. Encima de que pagamos por morirnos de pena
salimos sintiéndonos “solteronas”.
Lo que más
pena da es que seguro así nos veíamos nosotras como unas señoras de oso que
gritaban y cantaban éxitos de “teens” y que saliendo tuvieron que encerrarse en
el baño a llorar quedito por ser “solteronas” y nada, ahí me quedé…